El cambio climático golpea la cuenca del Mediterráneo y amenaza su futuro turístico
Los operadores turísticos temen que la gente busque en el futuro horizontes con menos riesgos y temperaturas más soportables
Varias regiones de la cuenca del Mediterráneo están siendo afectadas por intensos incendios y altas temperaturas que se incrementan año tras año durante el verano. Los bomberos de diferentes zonas de Argelia, Grecia, Italia y Francia luchan actualmente contra las llamas, en un fenómeno que ha trastocado el turismo, una parte muy importante de la economía de la región, especialmente en Grecia y España, donde representa cerca de una cuarta parte del Producto Interno Bruto (PIB).
La lucha contra las llamas
En Argelia, el fuego ha causado al menos 34 muertos desde el domingo. Los bomberos continúan sus esfuerzos para apagar 11 focos aún activos en el norte y el este, tras haber controlado la mayoría de los incendios. En Tudja, en el nordeste -donde murieron 16 personas-, el incendio ha sido contenido casi en su totalidad, a pesar de algunos focos persistentes. Aviones de extinción de incendios han lanzado agua durante dos días sobre esta zona boscosa, situada a orillas del Mediterráneo en Béjaia.
En Grecia, dos pilotos murieron en el accidente de un avión Canadair y el cuerpo de un hombre fue encontrado carbonizado el martes, en medio de las intensas llamas que asolan el país. El avión bombardero de agua se estrelló en un barranco mientras luchaba contra un incendio forestal en el sur de la isla de Eubea.
Las imágenes de bosques y vegetación calcinados conmueven a toda Grecia y el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, advirtió que la lucha contra los incendios seguirá siendo "difícil".
El sur de Italia está afectado por una fuerte ola de calor, registrando temperaturas de hasta 47,6º C como sucedió el pasado lunes en Catania, Sicilia.
Los cuerpos de dos septuagenarios fueron encontrados carbonizados en una casa presa de las llamas y una mujer, de 88 años, murió cerca de Palermo, informaron los medios el martes por la noche.
Por otra parte, los bomberos sicilianos lucharon durante la noche del lunes contra varios focos, uno de los cuales llegó muy cerca del aeropuerto de Palermo, que estuvo cerrado durante varias horas por la mañana.
El presidente de la región siciliana, Renato Schifani, indicó que quiere pedir al gobierno -que se reunirá el miércoles en consejo de ministros- que decrete el estado de emergencia en la isla mediterránea.
En Francia, los bomberos lucharon la noche del martes contra un incendio atizado por ráfagas de viento que amenazan pueblos en Alta Córcega, un departamento francés situado en la isla de Córcega. Según un último balance, unas 130 hectáreas de vegetación fueron arrasadas por las llamas.
Las altas temperaturas afectan al turismo
Las regiones que atraen a más turistas son también las más afectadas por el cambio climático. En Grecia, miles de turistas fueron evacuados estos días de las islas de Rodas y Corfú, devastadas por incendios favorecidos por la ola de calor.
En España, las temperaturas a veces superaron en 15 °C las temperaturas promedio de la temporada, mientras que este lunes Túnez experimentó 49 °C. Mientras tanto, Croacia declaró un incendio este miércoles cerca de la turística localidad de Dubrovnik.
También se declararon incendios en Portugal, en la costa atlántica, donde ocho bomberos resultaron heridos y cientos siguen movilizados este miércoles en los alrededores de la ciudad de Sintra, un destacado destino vacacional al noroeste de Lisboa.
¿Está comprometido el turismo en los países más cálidos?
Las fuertes temperaturas estivales podrían desanimar a los visitantes, advierten los profesionales del sector.
Según Jean-François Rial, jefe de Voyageurs du monde (Viajeros del mundo), "el calentamiento climático hará que los destinos sean cada vez menos atractivos. Todo el Mediterráneo está involucrado, ya que es el principal destino de los viajeros europeos".
En España, "ya estamos viendo turistas que están cuestionando" la idea de ir a "la costa mediterránea", afirma Joantxo Llantada, profesor de MBA Turismo en la IE Business School. "Los efectos del calentamiento global que pensábamos que llegarían para 2050 los estamos viendo ahora mismo", añade.
Según una reciente nota de Moody's, las olas de calor podrían reducir la atractividad del sur de Europa, o "al menos reducir la demanda en verano, con consecuencias económicas negativas".
¿Qué países podrían beneficiarse?
Cuando no es posible visitar una ciudad afectada por la ola de calor, los turistas pueden optar por ir a otro lugar.
Según Jean-François Rial, en los últimos diez años, "los destinos del norte de Europa" han aumentado y podrían beneficiarse Inglaterra e Irlanda. Algunos visitantes españoles e italianos están buscando destinos más frescos, dice Pierre Coenegrachts, de la agencia regional de turismo de Valonia, en Bélgica.
¿Cuál es la alternativa?
Los profesionales del sector están de acuerdo en que el turismo cambiará y anticipan que el Mediterráneo podría atraer a más visitantes en otras temporadas distintas al verano, ya que muchos de los turistas son jubilados.
Hamit Kuk, presidente de la asociación de agencias de viaje turcas, dice que "aunque los problemas climáticos mundiales siguen aumentando, tendremos que replantearnos nuestras temporadas (...). Tal vez debamos incluir noviembre en la temporada de verano y abril en la de invierno".
Para Rial, "eso sería bueno para reducir el turismo excesivo" que se produce en una temporada, "perdiendo clientes en verano, pero ganándolos en los otros nueve meses del año".
Juan Muñoz, jefe de promoción turística en la región de Valencia, en España, indica que el sector "está empezando a tomar una serie de medidas" para "adaptarse" y es posible que "pierdan visitantes" en verano, pero tendrán "una temporada turística más amplia".