Cristian Pinales se vio tentado a decidir entre el baloncesto y el boxeo
Compartió los dos deportes, hasta que fue llamado por la selección de boxeo
El campeón de los 80 kilogramos en el torneo de boxeo de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Cristian Pinales y clasificado a los Juegos Olímpicos de París 2024, bien pudo estar festejando esos logros en otro deporte: el aro y el balón.
Sí, Pinales, el “nacido y criado, de La Romana”, de 23 años de edad, cuando ponía en una balanza baloncesto y boxeo, la balanza ni se movía. Daba el mismo peso para el balón o los guantes.
“Cuando terminaba de practicar boxeo, me iba corriendo a practicar baloncesto”, señala Pinales, quien era jugador de los “Huracanes del Barrio York”.
Formado por su entrenador base, Silverio Peguero De Aza, Pinales se sentía seducido por los dos deportes.
Jugó “bastante” con Huracanes y por su talento entonces recibió una beca del reconocido Colegio Shalom, de La Romana. Llegó a participar “aquí en la Copa Claro”.
Todo eso mientras compartía con el boxeo, su otra pasión. “Tuve varios eventos. Sí -dice-, yo era bueno jugando baloncesto”.
La decisión
Como todo en la vida, pasado el tiempo llega un momento en que el camino se bifurca. Pinales no iba a escapar a eso.
Y entonces, el joven dejó el baloncesto. ¿La razón? “No seguí porque la selección de boxeo me llamó primero”, dice y deja escapar una sonrisa. “Entonces me decidí por el boxeo”.
Ya el paso está dado. Y Pinales se cuenta como boxeador. “Ya soy boxeador. El basketaball es de hobby”, señala.
No es el único caso. Luguelin Santos estuvo en ciclismo, antes que atletismo, Félix Sánchez y Carlos Santa estuvieron en béisbol, antes que atletismo también y la exarmadora de la selección nacional de voleibol, Karla Echenique estuvo en baloncesto antes que ese deporte.
No hubo una búsqueda por parte de los entrenadores del baloncesto. “No, Porque cuando yo salí del Shalom, ya, que me decidí a practicar boxeo, les había dicho a ellos, claro que me iba a ir para la capital a practicar boxeo, entonces me dijeron vete con Dios”, dijo. Hoy es candidato a una medalla olímpica.
Pero la fiebre sigue en la sábana. Pinales no juega partidos oficiales. El boxeador, cuando tiene momentos libres, sale “y tiro unas cuantas peloticas, porque eso no se olvida. Solo tirando suavecito”, señala. Eso sí, nada comprometedor, tampoco va a arriesgar su carrera con una lesión fuera de su deporte. En especial, un boxeador que ha ganado a varios peleadores de corte mundialista.