VIDEO | Hallan otro cadáver en la cañada donde cayó la patana y el autobús del accidente de Haina
A las 8:30 de la noche llevaron una excavadora a la zona ante la posibilidad de encontrar más cuerpos
Anoche, 38 horas después de permanecer bajo el cemento desparramado por la patana que chocó con un autobús, fue sacado el cadáver de un hombre, que sería la víctima número 11 del accidente de tránsito ocurrido la mañana del miércoles en Quita Sueño de este municipio de Haina, provincia San Cristóbal.
El cuerpo corresponde a un hombre y estaba sepultado bajo el concreto que se formó al derramarse el cemento. Fue llevado al hospital Juan Pablo Pina.
La presencia de decenas de personas en el lugar obligó a los brigadistas a tender una lona para evitar que los curiosos grabaran con sus celulares la extracción del cuerpo. En horas de la tarde, ante la presencia masiva de ciudadanos, las autoridades acordonaron la zona en la que cayeron la patana cargada de cemento y el autobús de la Ruta 66, en Quita Sueño, de Haina, a la altura del kilómetro 14 de la carretera Sánchez.
Con el paso de las horas, el cemento se endureció y complicó las labores de búsqueda de posibles cadáveres sepultados debajo de los escombros.
El endurecimiento del cemento vertido en el “Hoyo de Yoya”, que tiene una profundidad de unos 20 pies y donde había agua acumulada, obligó a buscar una excavadora.
Conductor autobús seguía desaparecido
Julio Manuel Rodríguez, hermano del chofer del autobús había expresado en horas de la tarde de ayer la desesperación de la familia por conocer el paradero de su pariente “vivo o muerto”.
Expresó que la información que tenía era que su hermano Ubri Méndez estaba ingresado en el Hospital Municipal de Engombe, sin embargo, no lo encontró en el centro de salud.
Rodríguez manifestó que está desesperado por la situación al ver cómo la madre de ambos sufre tras no saber nada de Ubri.
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Chofer de patana
El chofer que impactó el autobús de la ruta 66 en la comunidad Quita Sueño de Haina, provincia San Cristóbal, se encuentra detenido en la Casa del Conductor, en la avenida Simón Bolívar, en el Distrito Nacional.
Camilo Confesor Terrero Cuevas, de 36 años, estará en la institución hasta que concluyan las investigaciones sobre el accidente que costó la vida a 11 personas y dejó heridas a unas 17, la mañana del miércoles. El vocero de la Dirección General de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), Miguel Balbuena, precisó la retención del conductor y su estatus legal a Diario Libre. Aclaró que no puede dar más detalles para no entorpecer las indagatorias sobre el caso. De acuerdo con testigos, y según muestra una cámara de vigilancia, el accidente se produjo cuando la patana bajaba por una pendiente a alta velocidad.
Dan de alta a ocho accidentados
El Servicio Nacional de Salud (SNS) informó anoche que doce pacientes continúan ingresados por el accidente de Haina, mientras que ocho han sido dados de alta médica.
De los doce pacientes afectados, tres (dos mujeres y un hombre) se encuentran en estado delicado y están siendo atendidos en el Hospital Juan Pablo Pina, en San Cristóbal. En las últimas horas, cinco personas han sido dadas de alta de este hospital.
Además, un hombre de 49 años que recibió atención en el Hospital Municipal de Barsequillo, en Haina, también fue despachado.
De los doce pacientes afectados, tres (dos mujeres y un hombre) se encuentran en estado delicado y están siendo atendidos en el Hospital Juan Pablo Pina, en San Cristóbal. En las últimas horas, cinco personas han sido dadas de alta de este hospital.
En Santo Domingo, un joven de 29 años fue dado de alta, mientras que una mujer de 24 años sigue ingresada en el Hospital Traumatológico Ney Arias Lora y se espera que sea dada de alta mañana.
En el Hospital Marcelino Vélez Santana, ubicado en Herrera, las siete personas que fueron recibidas continúan en estado estable. Una de ellas, una mujer de 57 años, está siendo evaluada para cirugía debido a una fractura en la pierna derecha.
Finalmente, en el Hospital Infantil Robert Reid Cabral, ha sido ingresada otra niña de seis años, hermana de la primera paciente de ocho, a quien ya se le dio el alta médica.