Escape de Yellowknife: evacuados huyen de los incendios forestales en Canadá
El ejército proporcionará aviones para ayudar a la gente a salir de Yellowknife. Más de 20.000 residentes de esta capital regional, tienen hasta el mediodía del viernes para salir por carretera o en vuelos comerciales y militares
"Muy nervioso, muy ansioso". Así se sentía Allan Gofenko, empleado de Radio-Canadá, antes de salir a la carretera, entre miles de automovilistas concentrados en un único enlace vial. La mayoría de los habitantes de Yellowknife utilizan la única autopista en dirección sur hacia la vecina provincia de Alberta, a varios cientos de kilómetros.
Tardó 5 horas en recorrer apenas 100 kilómetros desde Yellowknife, mientras las llamas del incendio iluminaban la autopista. A intervalos regulares, su coche tuvo que detenerse para permitir el paso de las máquinas que excavaban zanjas para detener el fuego.
"Empezamos a ver las columnas de humo de los dos incendios que afectaban a Yellowknife. Y siete Canadairs (aviones hidrantes) sobrevolaron la zona para atacar las llamas. Demasiadas emociones, eso seguro", dice Allan Gofenko.
Después de un viaje especialmente estresante, este residente de Yellowknife encontró refugio con su familia en Alberta, como muchos de sus conciudadanos. Varios centros de emergencia también han abierto sus puertas, y algunos ya están llenos. Las provincias vecinas de Saskatchewan y Manitoba también han ofrecido su ayuda a los refugiados que pronto llegarán en avión desde Yellowknife.
Refugio en Alberta
Baptiste Foisy partió en plena noche para evitar los atascos en las afueras de Yellowknife. Condujo a velocidad reducida durante largas horas en medio de un humo espeso, en un convoy de cinco vehículos. Se tomó un descanso en el único pueblo a 300 kilómetros al sur de la ciudad, preguntándose qué iba a pasar a continuación: "Llevé en mi coche a gente que huía de la ciudad. No sé cuáles son sus planes, si tienen algún lugar adónde ir. Estoy pensando en un lugar al borde de un lago donde podría ir si tengo que pasar unos días esperando a que cambie el viento. Creo que iría allí”, confiesa a RFI.
En la ciudad, los futuros pasajeros de los vuelos con destino a varias ciudades de Alberta forman una enorme cola en un aparcamiento. Esperan saber qué avión podrán coger para escapar de Yellownife y a qué hora. Las personas con dificultades para desplazarse ocupan los primeros puestos. Rébecca Alty, alcaldesa de Yellowknife, asegura que todo el mundo podrá marcharse: "Los vuelos continuarán hasta que ya no sean necesarios. Así que la gente no tiene que preocuparse diciendo que si no tengo un vuelo hoy no voy a poder salir. Habrá vuelos suficientes.
El ejército proporcionará aviones para ayudar a la gente a salir de Yellowknife. Más de 20.000 residentes de esta capital regional, tienen hasta el mediodía del viernes para salir por carretera o en vuelos comerciales y militares.
Hasta el jueves por la mañana, más de 1.000 incendios forestales estaban activos, incluidos unos 230 en los Territorios del Noroeste.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo que Ottawa "ayudaría como pudiera".